Seguimos recabando información sobre los riesgos para la salud, tanto de los polígonos de placas solares como de las líneas de evacuación y las subestaciones de Alta tensión proyectadas. Por lo que hemos podido revisar de toda la investigación hasta ahora sobre estos temas, lo que prevalece en todos los estudios es el principio de precaución al no existir todavía estudios concluyentes que limiten la exposición a este tipo de instalaciones tan sobredimensionadas.
En todo caso, ya existen estudios avanzados sobre la ionización del aire (efecto corona) alrededor de la línea de alta tensión que atrae aerosoles contaminantes que pueden ser esparcidos por el viento. Mediciones llevadas a cabo en líneas de alta tensión de 132 kilovoltios señalan que, a 1’80 m. de altura, hay un 20 % de aerosoles contaminantes que están cargados o llevan exceso de carga. Como media, este efecto se extiende a unos 200 metros de la línea en dirección del viento y en líneas de 275 Kilovoltios, hasta 500 metros.
Otros impactos significativos para la salud vienen derivados del uso, en subestaciones eléctricas y transformadores, de aceites, PCBs o del Gas SF6 utilizados como aislantes y que pueden generar gases y substancias tóxicas ante un eventual incendio. Vivir junto a una subestación eléctrica o transformador supone también un riesgo añadido derivado del uso de estos PCBs al ser sustancias con probable acción carcinógena sobre el ser humano Los síntomas descritos por la bibliografía asociados a una exposición crónica a los PCBs derivan de alteraciones del tiroides, inmunológicas y neurológicas en el adulto y en el recién nacido de madre expuesta: problemas de desarrollo de la movilidad , reflejos anormales , alteraciones en el aprendizaje, alteraciones tiroideas etc.
En la actualidad, existen pocas dudas sobre el aumento de la frecuencia de la leucemia infantil relacionada con la exposición a campos electromagnéticos que se crean en las líneas de alta tensión. Asimismo, cada vez hay más estudios que sugieren la relación entre la exposición a campos electromagnéticos de líneas de alta tensión, con cánceres de mama en mujeres. Existen, así mismo, estudios sobre alteraciones en la glándula pineal así como en la producción de melatonina y en el transporte de iones en la membrana celular con afectación especialmente del sistema endocrino de la fijación del yodo y alteraciones del ritmo del sueño y la vigilia.
La agencia internacional de investigación sobre el cáncer ha incluido los campos electromagnéticos como probables cancerígenos.
La legislación de diversos países es cada vez más exigente con el control de la distancia, entre las líneas de alta tensión y las zonas habitadas. La legislación del Estado español sobre distancias de seguridad de alta tensión establece límites claramente insuficientes en comparación con el resto de países para preservar la afección de la salud de las personas residentes cerca de los campos electromagnéticos. De hecho, cada vez más voces plantean la necesidad de modificar el reglamento vigente
En el mapa anterior, se ve claramente el área de influencia de esta línea y la cercanía a nuestros pueblos. En nuestra opinión no podemos dejar de exigir el principio de precaución y la necesidad de evitar riesgos severos a la salud de la población. Seguimos informándonos con la seguridad de que pararemos esta barbaridad.